Una... ¡para no creer! • Octubre 2009

Entre las decenas de noticias que a diario desafían nuestra credibilidad, cada mes seleccionamos las más jugosas. Será difícil, pero usted deberá encontrar la más desopilante, la única que no es verdad. Las otras, aunque no lo crea, son totalmente verídicas.

Cumbia, café e hipopótamos
Ahhh... el delicioso aroma e inconfundible sabor de un cafecito recién molido, el pegajoso ritmo de una cumbia sonando a la distancia, el abrumador desfile de esculturales morochas a la vera del caudaloso río Magdalena... La bella ciudad de Medellín mantiene intactos los encantos que seducen a sus habitantes y maravillan al turista.
Sin embargo, la gran atracción de esta ciudad colombiana, otrora azotada por la violencia del narcotráfico, son hoy en día los hipopótamos salvajes. No son tantos como en algunas zonas de África, es cierto, pero ¿en dónde más puede uno avistar estos abúlicos y masivos animales y al mismo tiempo realizar una caminata por las "rutas de fuga" construidas por el abatido jefe del Cartel de Medellín, Pablo Escobar Gaviria, y adentrarse en los exóticos lujos con los que el ex capo narco agasajaba a sus invitados? ¿Y de dónde salieron los hipopótamos? Pertenecían a su zoológico exclusivo. Una vez desaparecido Gaviria, los animales se adaptaron a la fastuosa naturaleza circundante y comenzaron a multiplicarse hasta transformarse hoy en una atracción turística, y al mismo tiempo en un peligro para el ecosistema local. Por alguna razón que los biólogos no han podido aún determinar, los hipopótamos muestran signos de exitación permanente, “como que están re-volados todo el día”, dicen quienes los han visto, y presentan un extraño polvillo blanco en los bordes de sus orificios nasales.

Confiemos en la Justicia
Las cámaras de video del playón hasta donde se acarrean los autos secuestrados por mal estacionamiento captaron las imágenes de una "mujer al borde de un ataque de nervios". Reclamando por la devolución de su auto secuestrado y negándose a pagar la multa correspondiente, increpaba a las empleadas que la atendieron con gruesos epítetos lanzados a viva voz: "¡Debería pegarte un cachetazo!" "¡Les pagan 1.200 pesos por joder a la gente!" Y hasta un incompresible "¡Todas morochas, ni una rubia contratan!", tal vez considerando que una mujer con distinto color de cabello haría un mejor trabajo.
Después se supo que la energúmena mujer se llama Rosa Elsa Parrilli, es jueza en lo contravencional y su juzgado se encarga de tramitar muchas de las multas que reciben los automovilistas porteños. También trascendió que Parrilli tiene más de 30 infracciones de tránsito impagas, la mayoría por mal estacionamiento.

¿Los delanteros que necesita Maradona?
Se jugaba otra fecha de la liga rusa, el Saturn ganaba uno a cero y el Spartak de Moscú no encontraba el camino para llegar al empate. Sin embargo, el panorama para el equipo que afanosamente buscaba el descuento se despejó cuando el árbitro sancionó un penal a su favor. El arquero del Saturn, confiado, le decía con gestos al delantero Alex que le atajaría el disparo. Sonó el silbato, Alex miró hacia el palo izquierdo del arquero y éste se agazapó con la vista clavada en el balón. Ninguno de ellos había llegado a mover un músculo cuando la pelota, dócil como una hoja sacudida por la brisa de la estepa, se introdujo al gol por la derecha del arquero que, estupefacto, se quedó mirando la trayectoria de la número cinco. El insospechado goleador resultó ser un hincha simpaticón, con varios kilitos de más y con algunas gotas de vodka en su sangre, que entró corriendo al campo de juego junto a un compinche para convertir el gol de su vida. El penal, por supuesto, se pateó otra vez. En realidad, dos veces más. Si terminó en gol o no, no debería importarnos demasiado.

Namasté
Desde temprana edad, la pasión de nuestro corrector Carlo Brancusi fueron las letras. Los libros lo atraparon con sus historias, y las reglas de la gramática lo fascinaban con sus intrincados prefijos, las conjugaciones verbales, el correcto empleo de los signos de puntuación, la impecable sintaxis y las funciones de las proposiciones subordinadas. Su carrera de corrector y redactor de artículos periodísticos se encontraba en el pináculo y su fogosa relación sentimental con un diccionario de sinónimos y antónimos marchaba viento en popa . Por eso nos sorprendió sobremanera cuando la semana pasada recibimos su llamado desde la lejana República de la India, para comunicarnos que había ido allí a probarse a un equipo de críquet, y que espera, con mucha práctica y dedicación, poder formar parte del seleccionado nacional de ese país.
Seguramente, su meditada decisión no tiene nada que ver con las recientes declaraciones del técnico del seleccionado Hindú, Gary Kirsten, quien sorprendió a muchos declarando que no sólo permite sino que además fomenta el hecho de que sus jugadores puedan mantener intensas relaciones sexuales antes de la competencia. Según Kirsten, las relaciones sexuales aumentan el nivel de testosterona en los hombres, lo que produce una mayor fuerza y agresividad. Siendo el críquet un deporte tan popular en la India, a los jugadores no les falta una legión de bellas admiradoras dispuestas a satisfacer las necesidades de los atletas y revelarles los secretos del Kama Sutra.
Pero bolbiendo a la nueba carrera de nuestro redator, le deceamos desde aqui muchos éccitos y de paso anunsiamos que si halguien conose un corretor de confiansa les paze nuestro numero. ©